Con India Martínez de Madrid al cielo

India Martínez conquista "Las noches del botánico" con un show emocional y poderoso. Una noche para el recuerdo.

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David Fraile
David Fraile
Fundador y director de lacajadmusicatv.com - Periodista , historiador del arte y devorador de libros. Coleccionista del universo Pixar.

A veces mi profesión me pone y me exige grandes retos como el de esta noche, poner descripción y palabras a la magia, esencia y talento de India Martínez tras su paso por «las noches del botánico». A India Martínez no hay que explicarla, hay que sentirla.

En el tramo final de la preparación de su nuevo trabajo discográfico, el cual ya estamos deseando conocer, India ofreció una calida noche de música arropando con su voz, su hechizo y su magia al publico que disfrutó de la primera hasta la última canción de su concierto.

Había ganas de música, había ganas de disfrutarla. Su directo,el de India, es una manera de sentir y de contar la música visceral , orgánica, de piel, ese sentimiento de infinto que crea en la piel de tu alma cuando ella rompe el silencio disfrada de canciones, juguetea con armonías que tu mismo desconocias o simplemente hace nuevas y únicas letras que ya forman parte de tu memoria musical presente y que es la esencia de su futuro.

India se dejó el alma y la voz en el escenario del botánico. Recorrió con la maestría de siempre sus grandes canciones, ya himnos y otras que ha sabido reinventar con la genialidad y la esencia que sólo ella sabe. Os voy a poner un ejemplo que define que se sintió una noche como la de ayer.

En «el día de la música», en un momento del concierto y postrada ante el piano que presidía el esencario del «infinito» ella acarició con su voz como nunca antes la había visto «un ramito de violetas». A India la música no le sale de la voz, le sale directamente del alma, de las entrañas, de eso que ella sola sabe significar en todo lo que lleva a cabo. Y eso es en esencia lo que India dejó ayer en el escenario de Madrid, su magia más esencial.

Ayer la música volvía a sonreir y mucho. Esa niña de grandes ojos marrones que lleva su suerte anclada a una clave de sol quedaba retratada entre canciones, entre fotos escondida y protegida y amada por el talento de India Martinez. Ayer la música era feliz y era gracias a India.

Durante más de 90 minutos todos los allí presentes acompañamos a la cantante en un cuidado recorrido por su larga trayectoria musical. La noche arrancó al ritmo de “La saeta” acompañada de un vídeo con referencias al covid, eso que durante los últimos años nos ha robado tantas noches como la de ayer.

“Me moría de ganas de estar aquí” confesaba la cantante antes de uno de los momentos más especiales de la noche. Esos Segundos previos a que arranque uno de esos temas que a nadie dejará indiferente, ni siquiera a esos “acompañantes”, como ella misma decía. Y “todo no es casualidad” empezaba a sonar en las Noches del Botánico.

India Martínez no solo es talento, es personalidad, esfuerzo, arte y magia de marca propia que ayer supo regalarnos en forma de un concierto para no olvidar. Entre canciones llegó uno de los momentos más mágicos de la noche, “¿una pedida de mano? ¡No me lo puedo creer” se sorprendía India. Y acompañada por la pareja, a la que ella misma invitó a subir al escenario, nos hacían partícipes de un momento extraordinario, que no podía tener otra banda sonora que no fuese “90 minutos”.

Algo más de 90 minutos fue lo que nos regaló India sobre el escenario. Lo suficiente para querer que una de las noches más cortas del año, fuese eterna.

Texto : David Fraile y Blanca Campos . Fotos : Cris Sánchez

INDIA MARTÍNEZ - NOCHES DEL BOTÁNICO por CRIS SÁNCHEZ
India Martínez - Noches del Botánico 2022
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