El otro día pude hablar con María Morales sobre su papel en la serie de Movistar+ “La Línea Invisible” que se ha estrenado recientemente. En la ficción María da vida a la madre de Txabi y José Antonio Etxebarrieta, el reflejo de una de esas madres que lucharon y han luchado siempre para dar un futuro a sus hijos.
María me reconoció que leyendo el guion ya se emocionó algo que la aferró al personaje y auguró una gran aventura de documentación y trabajo por delante. Además hay que tener en cuenta que este personaje existe en la vida real, algo que nos permite conocer que aparte de una madre luchadora fue una mujer que también luchó por sus derechos convirtiéndose en la primera funcionaria del ayuntamiento de Bilbao. Sin duda un personaje rico en matices.
La serie cuenta lo que sucedió antes de cruzar esa “línea invisible” una vez se cruza ya no hay más debate posible, porque has decidido no respetar la vida y tal y como ella me cuenta «el mayor respeto es la vida». Un respeto que se mantiene en la ficción.
Con María hablamos de los muchos detalles que hay en la serie y también de los silencios. Unos silencios que muchas veces usa su personaje para contar más que las propias palabras. Ese silencio es bueno, el que no es tan bueno es ese que lleva instaurado desde hace muchos años encima de según que temas o en una parte de nuestra propia historia.
Otra de las ideas que salieron de esta conversación fue la importancia de prestar atención a quienes a veces se encuentran en el medio de las opiniones, hay que frenar los bandos, los extremos y el fanatismo porque la historia nos ha demostrado ya muchas veces que esa polarización siempre acaba en dolor y odio… y todos sabemos que las guerras empiezan así.
Por suerte podremos ver a María en otros proyectos como El Ministerio del Tiempo dando vida a otra gran mujer como “Clara Campoamor” así como en la próxima producción de Netflix “Valeria” que se estrenará en breve.
Marta Juanola
