«Nunca presento libros porque si son buenos, me da envidia, y si no me gustan, no sé como hacerlo». Así comenzaba Màxim Huerta la presentación del nuevo libro de Risto Mejide, confidente y amigo por el cual hacía una excepción y subía unos escalones más arriba que el resto para preludiar a viva voz, junto a escritor y editora, que se trata de un libro de definiciones que ha tomado como el Santo Grial, de consulta imprescindible, con el que ha disfrutado, que ha vuelto a abrir, a releer y reafirmarse en lo maravilloso que le parece.
«Es curioso, la palabra Vocación y su correspondiente definición se encuentra entre Viajar y Vida» apunta.
Con esta reflexión, y tras la previa cascada de palabras de cariño y admiración hacia Mejide, los dos escritores acaban fundiéndose en un abrazo.
«Diccionario de las cosas que no supe explicarte» es la última publicación de Risto en la que, bajo la mirada de Màxim, ha usado las palabras que él ha querido (como ha hecho siempre si se me permite la intrusión). Se trata de un libro de definiciones entre las que ha escogido palabras que han ido marcando sus cuarenta y cuatro años y definiéndolas tal y como las ha sentido. En palabras del propio Risto: Aquí tienes 44 años de intentos emocionales y sentimentales resumidos en frases, definiciones y sentencias más o menos acertadas, eso ya lo decidirás tú. […] Y ése es el poder de las palabras importantes, que tratando de definirlas, en realidad son ellas las que acaban definiéndote a ti.
Entras las palabras a definir encontramos amor, odio, equipo, eternidad, todo… Cabe destacar que no se encuentra la palabra silencio. Pero el libro busca generar silencio. «Escribo para los silencios» dice Risto. Cuando se produce algo bonito en tu vida, de inmediato hay un silencio, y ese es el silencio que todos pretendemos generar.
El libro, que ya se encuentra en venta, se asemeja a su autor en su condición de objeto. Como él, duro por fuera, blando por dentro. Sin ilustraciones y con color ausente en la portada. «Es el libro más honesto que he escrito nunca». El autor aconseja a los libreros que no coloquen el libro en la sección de autoayuda, porque no cree que su venta vaya a ayudar a nadie más que a ellos mismos, a la editorial y a él, qué Risto. Tampoco aconseja colocarlo junto a los libros de poesía. Su lugar se encuentra entre los diccionarios de toda la vida.
Cierro este breve artículo con una frase que el escritor dijo en la presentación de este último trabajo y que, a pesar de no saber si es de creación propia o una cita de uno de sus admirados, me parece que resume a la perfección su esencia.
<<Uno escribe, primero, para saber lo que siente, y segundo, para empatar a los que admira>>
