En la música como en la vida hay personas que nos marcan y eso me pasó a mi con Ricky Martin. Llevaba semanas esperando volver a reencontrarme con él y con su música.
Uno de los shows más esperados de este verano en Madrid que ya desde bien temprano se veía en las inmediaciones del Wizink Center a todo un ejército de fans dispuestos a darlo todo con el artista boricua.
Pasadas las 9 de la noche y con un lleno hasta la bandera, Ricky Martin entró en escena cantando “Pégate”, canción lanzada en 2006 dentro de su álbum “MTV Unplugged”. Aquel disco fue todo un éxito en ventas.
Y seguimos con “María”, el tema que le abrió las puertas en nuestro país y puso a bailar a todo el Palacio de los Deportes. La temperatura empezó a subir y con “Adrenalina” la gente enloqueció saltando y bailando.
Entre canción y canción se dirigía al público para agradecer su apoyo incondicional durante tantos años; “Yo sé que va a ser una noche mágica, ya lo siento. Lo siento con sus sonrisas, con su energía, son sus miradas… Esta noche dejamos todo aquí hoy. Esta noche mi alma es tuya Madrid. Te lo juro”
No faltaron las baladas como “Vuelve”, “Asignatura pendiente”, “Tal vez”, “A medio vivir”, “Te extraño, te olvido, te amo” entre otras que emocionaron al público.
En uno de sus viajes a España a principios de la década de los 2000, Ricky conoció a la Mari de Chambao y de ahí salió “Tu recuerdo”, uno de los temas más importantes de la carrera del artistas puertorriqueño. Y para mi a nivel personal de sus mejores canciones de toda su discografía.
La traca previa fue alucinante, era un hit tras hit seguido. “La Mordidita”, “Por arriba, por abajo”, “Vente pa’ ca”… que deciros los que estábamos allí la gozamos muchos.
Una de las últimas y de las más esperadas fue “Livin’ la vida loca”, una canción muy acorde con lo que es vivir en una ciudad tan intensa como Madrid.
En un mes donde hemos vivido tanto fútbol tan seguido como es el caso de la Eurocopa con esa gran celebración de España por Madrid por las calles escuchar “La copa de la vida” me hizo recordar lo bonito que es la unión entre el fútbol y la música esa unión Invisible para la vez visible. A sus espaldas aparecían imágenes del equipo de Luis de la Fuente, un guiño que quiso tener el artista con nuestro país.
Sus éxitos son reflejo de una carrera impecable, donde la música ha sido su mayor bandera, llevándola por todo el mundo y haciendo que gente de todos los continentes bailen y canten sus canciones allá por donde va. Hablamos de un legado musical que sigue vigente a día de hoy y que sigue sonando igual de bien que el primer día.
Entre el público podíamos ver parejas que como comentaba con otro compañero para muchos era como volver atrás en el tiempo, en muchos casos 25/30 años atrás cuando ellos eran jóvenes, ahora lo siguen siendo pero en el espíritu.
Allá por el 2010, en la plataforma de Facebook, este artista comunicó al mundo su condición sexual y recuerdo perfectamente donde estaba aquel día. Este tipo de artistas que tienen voz y llegan a tantas personas tienen el poder de cambiar la percepción de las cosas de muchísima gente y hacer de este mundo un lugar mejor.
Para Ricky España es un país muy importante. En este país ha vivido grandes conciertos y tiene grandes amistades que sigue conservando desde hace muchos años. Algo tiene que tener nuestro país para que tantos artistas cantantes, actores modelos les guste y vuelvan siempre cada verano a disfrutar de cada uno de sus rincones de su gastronomía, pero sobre todo de su gente.
Un concierto que ha sido como un bálsamo para estas temperaturas tan altas que hemos tenido y que vamos a tener en Madrid dentro de este oasis musical llamado WiZink Center.
La música traspasa cualquier tipo de fronteras y nos enseña que en el amor uno debe ser libre de elegir a quien ama sin miedo a ser juzgado por los demás.