La valentía y la sinceridad son las mayores virtudes que puede transmitir un artista. Alba Reche ha demostrado desde los inicios de su carrera una trasparencia que la honra. Su sensibilidad ha quedado de sobra plasmada en sus dos primeros trabajos, “Quimera” (2109) y “La pequeña semilla” (2021). En su nuevo EP, “honestamente triste”, es donde, más que nunca, se muestra tan valiente como sincera.
Alba y su equipo presentaron en Madrid el disco en el que tanta ilusión y talento han dejado impresos. Alba dejándose llevar entre sus canciones ha conseguido esa reconciliación vital y emocional y quien sabe con la propia música. Es de esas pocas artistas que te permiten experimentar ante su minimalismo armónico una de las sensaciones más revolucionarias y más llenas de verdad que la música se ha permitido jamás.
Alba Reche es mucho más que música, es un baluarte de la originalidad y talento, la mezcla perfecta de la valentía de su directo y la sinceridad de su alma musical, sin duda es de ese tipo de artistas cuyo mimo y pasión en todo lo que hacen la convierten en alguien imprescindible y en parte fundamental de la banda sonora de nuestra vida desde el minuto inicial.
La sonrisa de Alba a cada minuto, dibuja esa satisfacción serena de alguien que sabe que ha creado lo que quería desde el primer momento, esa sonrisa permanece en la madurez musical de alguien que ha encontrado el refugio y la cura en la música, esa misma que se extiende ante ella en una mano de flores para que monte su puzzle de la mejor manera. La música desde ya está «honestamente feliz» y gracias a Alba Reche.
Es digno de reconocer que haya volcado tantos sentimientos en un formato breve, en el que crea un ambiente recogido, perfecto para abrirse en canal, como ya vimos en singles que lo han anticipado como “No cambies tu andar” y “Esa también fui yo (quiero acordarme)”. “Y si fuera sincera…”, canta en la intro que lo abre, en que termina diciendo “Estoy harta de tanto dolor, me cago en la puta”. Como gran artista que es, expía ese dolor en las canciones que componen este EP. “En este proyecto he indagado como nunca en la tristeza, el sentimiento que más fácil te enreda, y en el que resulta más fácil quedarse a vivir”. Reche asegura haber aprendido a relativizarlo mirándola a la cara, convirtiéndola en temas que navegan entre la fragilidad y un inspirador empoderamiento.
Afirma que si ha apostado por un proyecto breve es porque no quería dejarse atrapar por ese sentimiento triste que lo sobrevuela, “y para que la gente pueda acudir a él cuando necesite escuchar a alguien que se ha sentido como ellos”. Fue tras un viaje en tren en el que se puso a escuchar su música cuando surgió el germen de “honestamente triste”. “No suelo escuchar mis canciones cuando ya han salido. Sin embargo, ese día lo hice, esperando encontrarme con alguna canción que me desgarrara. Pero los sentimientos que vi en ellas ya no dolían”. Tocaba enfrentarse a la tristeza acumulada en su interior. Sin miedo, sin poner barreras.
Un EP absolutamente confesional concebido “como un pequeño diario. He intentado hacer el ejercicio de no esconderme a través de metáforas, de contar las cosas tal cual las viví y llevarlas a canciones”. Sin ningún temor a que veamos a la Alba más auténtica volcar vivencias y sensaciones. Algo que nunca resulta fácil de primeras. “No negaré que sentí miedo cuando, de repente, el EP tuvo ya título”, confiesa. “Pero ya está, ya pasó”.
Acompañada por artistas como OODLIQUOR y Dani Sabater, Reche ha dado forma a un proyecto repleto de contrastes y aristas, que invita a múltiples escuchas para ir descubriendo cada pequeño detalle que lo enriquece. En el que llama la atención cómo canciones con base electrónica como “Sincera” y “Estoy azul” conviven con el resto, de naturaleza más acústica. También tiene su por qué. “Las bases, como las letras, son otra forma de hacer llegar un mensaje. ¿Por qué no experimentar también con la producción?”. Porque hay muchas maneras de exorcizar la tristeza, y Alba ha querido plasmar todas las que ha vivido.
Su primer directo con este disco entre las manos y el alma, entre la voz y su silencio fue un recuerdo imborrable, abrazando a tod@s l@s que quisimos apoyarla y sentirla, en decirle que pase el tiempo que pase, que siempre estaremos con ella como aquella primera vez. Alba, lo hiciste, lo disfrutaste, lo sufriste, lo abrazaste y lo besaste con el corazón. Que viva tu música.
Se siente en su mejor momento como intérprete, autora y productora, y este EP lo refleja. “Ya no me juzgo tanto, ni intento esconderme tras un personaje, como quizá hacía en mis primeras canciones sin darme cuenta”, asegura. “Me siento válida para lo que hago”. Y es su honestidad la que la hace brillar.