El poderío de Nicki Nicole arrasó Madrid con un show que solo puede ser ‘parte de ella’

Nicki Nicole llegó a Madrid dispuesta a comerse El Invernadero de Las ventas con su gira Parte de mi, después de haberlo hecho en la Sala Barts de Barcelona.

Sus temas Colocao y Mala Vida, dos de los más conocidos de su discografía, son los encargados de abrir el show de la argentina acompañados de los gritos de sus fans, que han esperado desde noviembre con sus entradas compradas y el cartel de SOLD OUT colgado en los dos shows españoles con los que la artista nos ha deleitado.

En su última visita a nuestro país pudimos disfrutarla encima del escenario del Cocacola Music Festival donde cautivó los corazones de todos los allí presentes, incluido el mío y es que, Nicki tiene una energía y un poderío muy difícil de imitar. «Las mejores esencias se guardan en frascos pequeños», eso me decía mi madre cuando era pequeña pero es que en el caso de Nicki no hay mejor descripción.

El show continua con Darling, tema perteneciente al disco que pone nombre a esta gira y Cuando te veo, su colaboración con Bizarrap.

Y llegó el momento de ponerse emotivo. Nicki pide la ayuda del público para cantar a capela un fragmento de Plegarias. El primer intento resulta fallido provocando las risas de todo el mundo pero, ¡qué nadie se desanime!, vamos a por el segundo y efectivamente, casi rozamos el éxito. No pasa nada, allí esta ella y su piano para solucionarlo y hacernos lloran un poquito.

Su voz es diferente, es especial y en directo no hace más que mejorar. El recinto no acompañaba con las mejores condiciones acústicas ni logísticas pero la calidad estaba presente en todo momento.

Años luz, Entre nosotros y Dame son los siguientes protagonistas antes de introducir la segunda parte del concierto con un video resumen de su exitosa y novedosa carrera. Unas cuantas fotos de ella cuando era niña nos introducen su tema Baby que, aunque la letra no tiene que ver con su infancia es una buena forma de crear conexión entre temáticas.

Una parte de nosotros esperaba ver a Nicki esta noche cantar Formentera acompañada de Aitana pero no ha podido ser así que, el público se ha dejado la voz y la energía en hacer que no se notase su ausencia. Y sin duda lo han conseguido pero seguimos cruzando los dedos para que algún día podamos disfrutarlas juntas encima de un escenario.

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Es el momento de no bajar la guardia. Tengo to, No toke mis Nike y Sabe se adueñan del momento justo antes de presentar al primer invitado de la noche. Entre fuertes aplausos y vítores sale al escenario Dellaosa para compartir con ella sus temas Me has dejado y Veneno.

Y digo primer invitado porque las siguientes invitadas ni siquiera se lo esperaban. La artista hace un llamamiento, quiere a dos personas que sepan bailar cumbia juntas para darle vida a su tema Otra noche y arriesgando su alma con una mentira por conocer a su artista favorita, dos chicas del publico se lanzan a la aventura. El asunto termina con Nicki enseñándolas a bailar y ellas saliendo del escenario felices con un momento más para recordar a sus espaldas.

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Último empuje de la noche. Es el turno de Ella no es tuya, ese tema que gracias a Tiktok se metió en los hogares de todo el mundo y que a veces escuchábamos sin ser conscientes de quién lo cantaba. En Mamichula todos hemos echado de menos a alguien, su compañero de vida Trueno, que no ha podido tampoco estar en Madrid pero que desde Buenos Aires vive la gira de su chica con toda la intensidad que le es posible.

La argentina recoge dos banderas españolas del público y se envuelve en ellas para declarar su amor incondicional por sus fans españoles y por nuestro país mientras se despide con Ya me fui y Wapo.

Nicki Nicole nos ha hecho querer volver a aquellos tiempos en los que no necesitábamos distancias, mascarillas ni medidas sanitarias especiales. Ha sido un ensayo y quizás un amago de que pronto podremos volver a vivirlo pero en mi caso sigo siendo incapaz de dejarme llevar por la música sin importar nada más.

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Han vuelto los conciertos con el público de pie en pista y la inexistencia de las mascarillas, aunque ahora eso suponga saltarse la ley y la ausencia de respeto hacia los que te rodean… la organización y el equipo de seguridad sin intervenir y muchas dudas acerca de si en caso de accidente, hubiéramos estado preparados para desalojar el recinto a tiempo. Nos queda un camino por recorrer y quizás El Invernadero debería haberse quedado en un experimento musical y no en una forma de querer hacer conciertos a toda costa.

Ahora nosotros tenemos que volver a poner el contador a cero y cruzar los dedos para que muy pronto ella nos vuelva a visitar y así podamos disfrutar de su estilo, su buen rollo y su infinito talento.

Nicki Nicole 'Parte de mi' por Josune Ordóñez