Cuando alguien se sube al escenario y se siente como en casa se nota. Se vive. Se siente… y esto es lo que pasó el otro día con David Bisbal en el Polo Music Festival de Barcelona.
Después de celebrar su aniversario en el Real de Madrid le tocó el turno a Barcelona. Su Barcelona querida. Allí donde muchas cosas empezaron y donde siempre siente que está en casa, tal y como afirmó él mismo, pero es que David ha hecho del escenario su casa particular.
Durante casi dos horas David viajó junto a su público por un mar de historias hechas canción. Canciones que le acompañan desde siempre y otras que se han ido sumando… como su gente. Un público fiel y entregado que vibró, saltó y cantó junto a él sin pausa.
Hay gente que ha nacido para esto. Hay gente capaz de atrapar con su magia y su esencia sin necesidad de grandes efectos especiales. Hay gente capaz de llenar un escenario tan solo con su presencia. Hay gente que lo lleva dentro. Hay gente como… David. Gente que ama y respeta lo que hace… y esto se contagia y se convierte en uno de esos secretos a voces de este mundo loco.
El otro día David fue el encargado de poner punto y final a la primera edición del “Polo Music Festival” de Barcelona. Una clara apuesta por la música que parece haber nacido para quedarse.
Qué bonito es sentirse en casa cuando no estás en casa. Qué bonito es construir una casa allí donde vas. Qué bonito es tener un lugar al que volver cuando todo se apaga. Qué bonito es seguir con la misma ilusión del día en que todo empezó. Qué bonita la MÚSICA…
