«No se porque hoy nos tocó vivir esta primera vez y porqué no fue hace dos años pero les prometo que lo hemos soñado mas que ningún otro artista».
Hace aproximadamente tres años, Mau y Ricky confirmaban el que iba a ser su primer concierto en España, pero la ilusión duró poco porque en Marzo de 2020, tan solo un mes antes de la fecha elegida para ese gran día, nuestro país entró en confinamiento y el show tuvo que ser cancelado.
La verdad es que, todo llega en el momento que tiene que llegar y eso es algo que Mau y Ricky saben muy bien. Por eso la noche del 12 de septiembre de 2023 no ha sido una noche cualquiera para ellos. Ha sido la noche en la que por fin, cumplieron el sueño que les esperaba al otro lado del charco.
La Riviera de Madrid, se ha convertido en hogar y familia para los seguidores de este duo tan especial. La energía se respiraba en el ambiente y las ganas de fiesta venezolana podían olerse a kilómetros.
Pasados unos minutos de las 21:30 se apagaron las luces de la sala madrileña, para dar comienzo a tan esperado show. Ricky aparece en el escenario a los mandos de una guitarra eléctrica, Mau se apodera de la batería y con sus uniformes de pantalón por las rodillas, chaqueta, camisa y corbata comienzan los primeros acordes de Papás, un tema perfecto para calentar el ambiente y dejar claro que tienen alma de sinvergüenzas: “No quiero conocer a tu papa porque se que si me ve me va a matar”.
Tras este, Mau abandona la batería y juntos interpretan Prende la cámara, y transmiten toda la energía que el público necesita para después continuar con su canción La grosera.
“Estamos viviendo una primera vez en España, que significa mucho”. Entre el público hay mucha cara joven, en las primeras filas se agolpan niños y niñas acompañados de sus padres, que vienen con muchas ganas de cantar y pancartas con mensajes que tocan el corazón de cualquiera: “Mi perro se llama Ricky por ti”, “Vine desde Venezuela por esto” o “Celebro aquí mi cumpleaños”, son algunos de ellos.
Es el turno de Ya no tiene novio, uno de sus mayores éxitos, y nosotros decidimos movernos al final de la sala para descubrir los secretos que se esconden entre el público. Una niña, que no debía llegar a los 5 años, se deja el alma con tremendas coreografías junto a la que parece ser su madre.
Una de las cosas más bonitas que se pueden destacar no solo de Mau y Ricky, sino de toda la familia Montaner, es que en sus shows no dejan de tener gestos de gratitud con todos sus músicos. Al finalizar algunos temas, siempre se acercan a ellos para darles la mano y dedicarles unas palabras fuera del micrófono.
La Riviera no es muy conocida por tener buena acústico, pero hay que decir que la experiencia del artista también es un factor importante en este asunto. Con una familia construida sobre la industria musical y habiendo desarrollado sus capacidades desde niños, podíamos esperar un buen resultado de su equipo y efectivamente, así fue.
La producción de Mau y Ricky ha tenido en cuenta detalles como la presencia de pantallas. No es un recinto en el que podamos pensar que las pantallas son imprescindibles, como podrían serlo en un Wizink Center o un Civitas Metropolitano, porque suele verse bien desde cualquier punto, pero para completar un buen show, los visuales, los efectos y facilitar la visibilidad al espectador, nunca está de más para cerrar el círculo de una buena experiencia.
Mi mala es la siguiente canción, una oda bailable al desamor y al sentirse despechado, que compartieron con La Bichota hace 5 años y que es imposible no conocer en medio de la locura mundial que hay actualmente en torno a la gran Karol G. Las pantallas muestran en esta ocasión parte de las lyrics.
El siguiente tema comparte características. Es una colaboración con una de las artistas más exitosas del momento y es imposible no cantarla por inercia. La voz de Tini se apodera del escenario y el público corea Recuerdo.
Es momento para las colaboraciones, y aquí llega Bota Fuego para disparar de nuevo las energías. Es el feat de los venezolanos junto a Nicky Jam: “Si me quieres una noche, yo te hago el favor”. Pero Madrid no les quiere solo para una, quiere que vuelvan y ellos también.
Cada artista tiene sus pequeños lemas y en este caso nunca puede faltar que los hermanos pregunten a su público “¿Cómo lo están pasando?” y ellos respondan “De puta madre”, con toda la intensidad que sus pulmones les permiten.
“Es momento del romantiqueo. La siguiente canción la escribí para mi esposita”. Así presentó Ricky su tema Miami, la cual deciden dividir en dos partes. Mitad del tema, balada y guitarra acústica y la otra mitad para subir los ánimos e invitarnos a bailar celebrando que, Stefanie, mujer de Ricky, está presente también en la sala presenciando un momento tan especial como lo es que se interprete por primera vez en España.
Si hay algo de lo que Mau y Ricky se sienten orgullosos, es de ser venezolanos y cada vez que tienen oportunidad de dar a conocer o colaborar con talento de su tierra, lo hacen. En esta ocasión, invitan a Andry Kiddos al escenario para cantar Amigos, y le dedican unas bonitas palabras: “te admiramos mucho y es un lujo que seas venezolano”.
“Pasé la vida entera soñándome hacer un show en España. Si tanto nos lo soñamos, hagamos como nos lo soñamos”
El set torna en acústico para la llegada de Llorar y llorar, una balada que comparten con el artista mexicano Carin Leon. Aunque la letra de la canción habla de desamor y de no querer llorar, llorar no es malo y es algo que también puede hacerse sintiendo felicidad. Sus fans de la primera fila son el claro ejemplo. Perdóname y Manos frías, son los siguientes temas de esta etapa acústica que nos han querido regalar.
Y llegó el momento de escuchar uno de los discursos más bonitos que puedo destacarle a unos artistas, provocado por una niña que, en primera fila no puede contener la emoción. Si me permiten voy a transcribirlo casi en su totalidad, debido a la importancia de sus palabras:
“A veces los artistas nos perdemos en los números, en si a la canción le fue bien o no. Muchas veces se nos olvida la razón por la cual empezamos todo esto. A muchos artistas se les va la vida sin darse cuenta de la responsabilidad tan enorme que es que Dios les haya puesto, y en este caso a nosotros, en una plataforma como esta. Mientras cantábamos, he visto a una chica que estaba llorando y me hizo ver que, es por ella por lo que hago lo que hago. Por cada persona que algún día fue impactada por alguna canción nuestra o que hoy están siendo impartidas por algo que dijimos Ricky y yo”
“No se porque hoy nos tocó vivir esta primera vez y porque no fue hace dos años pero les prometo que lo hemos soñado mas que ningún otro artista. No queríamos dejar pasar este día sin darle las gracias a Dios por cada una de las personas que están en esta sala”.
“Sabemos lo que cuesta comprar una entrada, y que hayan elegido estar aquí teniendo mil opciones. Aquí a Madrid vienen todos a cantar y ustedes han elegido, un martes, venir a la gira de Mau y Ricky significa mucho” “Sois la base de todo lo que va a venir y puede ser que volvamos”.
“No sabemos lo que pueden estar pasando en casa pero les invitamos a que en esta familia de Mau y Ricky ustedes también pueden estar tal como son y con lo que sea que esté pasando en su casa, poder brindarles aquí 2 horas de distracción en una comunidad de gente a la que le importa la persona que tiene al lado, que estemos bien y queremos hacerlo visual”, “si han pasado por algo complicado últimamente o en esta momento, prendan la lucecita de su celular”.
“Si estás pasando un momento difícil, no estas solo. Si nuestras canciones les sirven de alguna manera, pueden usarlas cuando no saben que decir o estan pasando por un momento malo, nuestro propósito está más ligado a eso que a cualquier otra cosa”.
Anuncian la presencia de Eva Luna y Montaner en el show y una serie de proyecciones de la familia Montaner en las pantallas, dan paso al tema que sacaron como familia, Mau y Ricky, Eva Luna, Camilo y Ricardo Montaner: Amén, con el que abrieron sus almas y se expusieron emocionalmente, como nunca antes. Puede considerarse una oración. La familia Montaner es fiel creyente de Dios y esto es algo que se ve en todo lo que hacen.
Su carrera está llena de colaboraciones familiares y Camilo no podía no ser una de ellas. La Boca suena en el escenario, pero Camilo es el único que no está presente en el show de esta noche. Tuvo que viajar a Los Ángeles pero, habría sido un precioso momento si se hubiera quedado y les hubiese acompañado. Debemos destacar que, aun con la facilidad de contar con la presencia de Eva Luna y Ricardo Montaner, estos decidieron no subirse al escenario y no quitarles protagonismo en un momento tan esperado como su primer show en nuestras tierras. Un gesto muy bonito, pero que de no ser así nos habría dado un momento único, que seguramente solo se viva una vez y si eres muy afortunado.
Sus temas Sigo buscándote y Me enamora se acomodan en un mix, y ambos artistas sueltan sus caderas para echarse un bailecito. Pero el show se ve interrumpido por una alarma: «¡Peligro!, ¿Mau tiene que ir al baño?». Ricky hace una broma para poder adueñarse de la batería en ausencia de su hermano, que ha abandonado el escenario.
Con las primeras notas de 3AM, Mau regresa y recupera su posición. El calor empieza a hacer efecto y Ricky ya no soporta más la chaqueta del uniforme “escolar” para interpretar No puede ser.
Cuando se ha creado un éxito como Sin pijama, es lógico querer reivindicarlo. Mau y Ricky crearon este himno para Becky G, pero en sus shows quieren demostrar que con sus voces también podría ser muy interesante escucharla con nuestros auriculares.
Las peleas entre hermanos no son agradables, a no ser que las organicen ellos y consistan en dividir al público en derecha e izquierda y ver que mitad hace más ruido. El asunto termina en empate técnico porque: “No hay Ricky sin Mau, ni Mau sin Ricky”.
La voz de la cantante y compositora más escucha de Argentina en la actualidad se mezcla con la de Ricky Montaner en su tema Mal acostumbrao. Se ha adueñado de la estrofa de María Becerra y no le sienta nada mal.
Antes de marcharse, quieren dejar huella en nuestros corazones para que les recordemos de forma especial, y le entregan al publico español un regalo en forma de canción.
Vas a destrozarme es un tema inédito, no se ha podido escuchar antes, es la canción favorita de Ricky en esta nueva etapa que les espera y, será parte de su próximo disco Hotel Caracas.
No pueden dejar a sus más fieles seguidores sin escuchar Desconocidos, estamos en los últimos minutos del show y la fiesta no para. El volumen sube, todos los presentes se la saben y no pueden dejar de saltar. La energía y la magia que la sangre Montaner le pone a todo lo que hacen, se contagia y algo se apodera de los cuerpos. Saben dejar el show por todo lo alto y deciden invitar a subirse a las tablas a todo aquel que quiera.
El escenario se llena de niños que les abrazan emocionados y viven junto a ellos, uno de los que serán los momentos más especiales de sus vidas.
Los Montaner tienen algo, ese algo que hace que si comienzas a escuchar a cualquiera de ellos, te pique la curiosidad y decidas terminar conociendo a la familia al completo. Son una unidad, tal y como demostraron en el estreno de su documental, y son capaces de arrastrar a su público a una espiral de amor y admiración que pocas familias tienen de forma sincera.
Desde la zona de invitados, todos ellos gritan cada uno de los temas que Mau y Ricky decidieron interpretar esta noche, Ricardo Montaner no deja de grabar con su teléfono, Marlene no puede parar de emocionarse y ser testigo de momentos que sus hijos no puedes apreciar por estar alejados del escenario. Allí, una niña que ha dibujado una pancarta en la que dice que es su cumpleaños, lo celebra junto a ellos y ellos no dejan de saludar a todo el que se acerca a su zona.
Durante todos estos años, he leído en redes sociales, a personas indignadas con la manera de ser de Los Montaner, comparándoles con una secta y sin comprender que, de puertas para adentro nadie sabe como es cada familia pero, el mensaje que proyectan al exterior es amor, sinceridad, confianza, protección, admiración, apoyo… y demuestra perfectamente, que saben cuidar lo importante: De su familia y, a todo aquel que se toma su tiempo para permitirles cumplir el sueño que todo tienen en común: la música.
Mau, Ricky, gracias por esta fantástica noche y, ¡Que sean muchas más!.
