Hace unos días tuvimos la suerte de poder hablar con Icíar Bollaín sobre “Maixabel”, su última película. Pudimos hablar con ella sobre los inicios de esta nueva aventura y sobre el proceso de documentación y guión junto a Isa Campo.
Icíar, nos contó que tanto Maixabel Lasa como María Jáuregui han acompañado y participado activamente en el proceso de documentación pero también lo hicieron los personajes del “otro lado”, ya que tanto Ibon como Luis colaboraron y ayudaron sin problema en todo lo posible. A la vez, otras víctimas del terrorismo, mediadores… también han contribuido en la construcción del proyecto permitiendo así que muchas de las voces representadas en la película traspasaran la pantalla de una forma veraz y especial.
Cuándo hablamos del rodaje nos asegura que “en el rodaje se trabajó siempre con mucho respeto. Todos opinaban que aquello valía la pena contarlo» y así nos cuenta algunas anécdotas sobre las visitas de Maixabel Lasa al rodaje, sobre las escenas de los homenajes y aprovechó para desvelarnos que en varias ocasiones la realidad está mucho más presente de lo que imaginamos en esas escenas. Emociones que una vez más traspasan y llegan al espectador.
Del momento estreno, Icíar nos reconoció que el mayor miedo que tenía era “que se reaccionara contra la película sin haberla visto”… esos prejuicios o esos vicios que tenemos a veces de criticar sin saber o sin haber visto y más aún cuando se tocan temas que a día de hoy siguen demasiado silenciados… pero sorprendentemente con “Maixabel” ha pasado algo distinto. La gente ha ido y está yendo al cine. La gente quiere saber. La gente quiere conocer. Y la gente habla. La gente comenta y los debates se abren de nuevo porque como dice ella “El cine tiene el poder de comunicar”.
En nuestra conversación también recordamos la importancia del saber escuchar. Algo que la película y en mi opinión el cine de Icíar nos muestra muchas veces. Hablar es importante pero escuchar también y si le añadimos el respeto y la generosidad humana que Maixabel nos muestra ya tenemos la combinación perfecta.
Finalmente, nos lanzó alguna pista de lo nuevo que está preparando, un futuro que tiene que ver con el mundo de las series y que está construyendo fuera de nuestro país.
Poder hablar y escuchar tranquilamente a Icíar durante más de treinta minutos fue un verdadero lujo y placer ya que muchas veces por los tiempos de las promociones esto no es posible, así que no os perdáis esta conversación tranquila y pausada sobre una historia que merecía ser contada como muchas otras que siguen en silencio esperando ser escuchadas.