Malú volvió a casa. Yo escribí muchos años atrás que era la «reina del palacio», aquel reino que con la magia de sus canciones y una personalidad arrolladora pasaba a convertirse de la «aprendiz» más hermosa a la reina más indiscutible.
Ayer Malú decidió recordarse, afirmarse en todo su esplendor escénico, vocal y humano. Recorrió su vida en canciones sin una sola duda, con una voz aun más plena y una sonrisa que traspasaba todas y cada una de las letras que regalaba al cielo del Circo Price.
Respecto al diseño del show, me atrevería a calificarlo como necesario y brillante. Malú, de siempre, su equipo y sus músicos son un salto de calidad para cualquier concierto que se precie, además 25 años de canciones dan para momentos para tod@s. Pasión, ritmo, baile, rabia, nostalgia, dolor, recuerdos… pero sobre todo música de absolutos quilates dieron forma a un concierto que nadie queríamos que se acabara.
Además una de las sorpresas fue la aparición rutilante junto a Israel Fernández, una de las mejores voces flamencas de nuestro país y una referencia indiscutible a nivel mundial. Como diría aquel «ángel caído» Malú ha conseguido convertir a sus canciones en refugio, en tabla de disfrute y de placer musical y eso cuando dibuja muchas de ellas en simple acústico, piano, guitarra y voz para dibujar con la voz y con el alma de todo aquello que la hizo y la convierte en única.
Una primera noche que ya forma parte del recuerdo, y aún nos quedan para disfrutar. Malú sobre el escenario sigue dibujando emociones, sino es la única o quizás de las pocas voces que te provoca cosas simplemente con sus primeros acordes, te tatúa dolor con «Desaparacer«, con «Ángel Caído» (posiblemente una de las mejores canciones en castellano de la historia), «Ahora tú» trae luz … muchas canciones que ayer fueron un poquito más nuestras.
Diseño de show cuidado, equilibrado, brillante, un sonido agradecido hacen de esta gira de «la jefa» uno de los eventos musicales del año, por que hay cosas que no cambian, pasará el tiempo, pasarán las canciones, se apoderará el silencio, pero Malú es de esas pocas elegidas que a través de su música supo reescribir nuestra historia.
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